Mirar a tus hijos, hermanos, pareja, y hasta a uno mismo, y no reconocer a esa persona. Las risas, los llantos, todos los recuerdos se van y no vuelven, y apenas queda la memoria emocional. Hablamos del Alzheimer, la enfermedad del olvido.
Aquellos que la sufren de cerca conocen el dolor psicológico que acarrea no sólo a quienes la padecen, sino a familiares y amigos. Hoy en nuestro tiempo de Mesa de Actualidad queremos hablar de esta terrible dolencia.