Ya lo dijo hace miles de años el sabio rey Salomón, “es mejor ser dos que uno, porque ambos pueden ayudarse mutuamente a lograr el éxito. Si uno cae, el otro puede darle la mano y ayudarle.” ¿Cómo podemos llevar mejor las dificultades de la vida gracias a la amistad?
Unos investigadores británicos y estadounidenses llegaron a esta conclusión: Las pendientes en el camino parecen menos empinadas al lado de un amigo. En un estudio con sujetos que fueron invitados a subir una colina solos o acompañados, cuanto más duradera era la amistad, menor era la pendiente que percibían los sujetos al final del trayecto.