La historia de la humanidad está ligada al desarrollo agrícola, y gran parte de las fiestas antiguas se relacionan con las épocas de cosecha o la llegada del buen clima, y los ritos mágicos que buscaban el favor de las fuerzas espirituales.
Con el crecimiento de la cultura occidental muchas de esas fiestas paganas se han difuminado con las fiestas religiosas. En la actualidad las fiestas populares se relacionan con las ventajas del turismo y con mejoras en el estado de ánimo de la población porque ofrecen tiempo de esparcimiento y de compartir cultural.